En el SXVII, un visitador apostólico afirmaba que la iglesia de Pedroso estaba muy maltratada, particularmente una pared de la nave que da a la calzada.
Se trata de una iglesia de tres naves individualizadas por tres arcos formeros, ligeramente apuntados, de sección baquetonada, se apean en pilares góticos adosados al cuerpo de la torre y a los frentes de las costaneras de la capilla mayor.
Las naves laterales, de testero plano, nada tienen de interés; la central, más ancha, presenta un ábside semicircular precedido de un tramo presbiterial recto, cubierto con boveda barroca de aristas que adornan suplementos con labores geométricas de resalte plano; más interés tiene el arco del triunfo, ojival, con labores cardinas en la rosca, y apeándose en magnificas mensulas en estas hay ángeles tenentes portando escudos. El del Evangelio trae: cuartelado 1º y 4º, castillo donjonado de tres torres el 2º y 3º caldera; el de Epístola lleva tira pontificia.
El arco es obra del primer cuarto del S XVI, coetáneo y quizá de los mismos maestros que trabajaron en la portada de la catedral.
Más interés tiene la torre que se levanta a los pies de la nave central; su cuerpo bajo se abre a la nave por medio de un arco ojival de grandes dovelas, adornando su rosca y jambas con bolas.
Escasamente a 50 cm. Se levanta otro arco paralelo al anterior, generando así una pequeña bóveda de cañón apuntado. El coro lleva una sencilla bóveda de cinco claves, con nervios cruceros, terceletes y nervios diagonales las claves se ornan con temas vegetales de gusto renaciente. Esta parte del coro alto debe ser la que el 7 de octubre de 1529 se obligaba a hacer el maestro Juan de álava, aunque no la terminó, traspasando el encargo al Pedro de Abalibide, cantero, de quien no se tiene ninguna obra documentada.
El maestro Juan de álava es el arquitecto de la catedral Nueva de Salamanca y del convento de San Esteban, fue el iniciador del estilo plateresco. También fue el arquitecto de la catedral y el colegio Fonseca de Santiago de Compostela, la catedral de Plasencia. Murió en 1537.
Los que conozcáis la iglesia de San Estaban podréis ver que existe mucha similitud entre esta y la nuestra, si no os habéis fijado cuando tengáis oportunidad hacedlo.
Sigamos con la iglesia.
Nave de la epístola: retablo de un cuerpo en una calle, con hornacina única, flanqueada por cuatro columnas salomónicas situadas en distintos planos, dando así lugar a una planta movida; es obra de la primera mitad del S XVII.
En el año 1790, costó el cielo raso de las tres naves de la iglesia, con materiales, mano de obra y licencias necesarias, la cantidad de 10000 reales.
Presbiterio: el retablo mayor se acopla perfectamente al medio punto de la capilla mayor; se compone esta gigantesca máquina de un cuerpo en tres calles más el ático, cerrándose en medio punto. La talla carnosa y abultada sitúa el retablo a finales del S XVII o principios del S XVIII. E n la calle central se abren dos hornacinas con fondo plano, la del cuerpo bajo reservada a la Virgen del Juncal; las imágenes de las calles laterales son, una de Santa Lucía en el lado de la epístola y otra de Santa Bárbara al lado del evangelio, obra del siglo XVI o comienzos de XVII.
Angel Gómez Carrasco